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Colección de Arte Aladar
Constituimos un museo virtual para nuestros lectores, irá creciendo, e informaremos puntualmente sobre su cotización.
Arco 2015
Rafael Díaz, ANTIRRETROVIRALES 1, 2011. Fotografía montada en metacrilato, 1/5 + 2AP. 148 x 200 cm GALERÍA ÁLVARO ALCÁZAR, Madrid. 15.000 €
Una obra de arte global donde se conjugan belleza plástica y técnica impecable. Se anticipó a la realidad en una investigación profundamente social sobre la asequibilidad de los medicamentos y el precio de la salud. El artista es también médico, salvadoreño, afincado en España desde hace catorce años. La honestidad del trabajo y su carisma, sitúan la imagen entre lo mejor de la feria. Son envases de medicaciones contra el VIH bajo campanas de vidrio.
Julian Opie, CARP, 2014. Pantalla LED. 168 x 168 x 11,7 cm. GALERIA MARIO SEQUEIRA. Lisboa. 117.000 €
En todos los corrillos se habla de él como del mejor stand de la edición. Los vecinos portugueses demuestran que son modernos en el sentido más profundo de la palabra: elegantes, innovadores y refinados. Apuestan con firmeza por un autor, arriesgándose; presentan una muestra espléndida de la que nos lo hubiéramos llevado todo. Hemos tenido que elegir, pero no hemos podido resistirnos a tres piezas. Ésta simula un banco de carpas -luminosas y minimalistas- que producen un efecto excepcional.
Julian Opie, PEOPLE 18 (TBC), 2014. Pantalla LED. 168 x 168 x 12 cm. GALERIA MARIO SEQUEIRA. Lisboa. 117.000 €
Un grupo de esos célebres andariegos que hacen icónico al artista, tuvimos ocasión de ver una pareja en Praga, en 2007, atravesando incansablemente el Moldava, y están en los más importantes museos. Provocan la mirada sobre lo individual y lo colectivo, en una sociedad que se mueve sin cesar hacia algo que no sabemos qué es o dónde está. En este panel Opie trabaja con el color, en una escultura de luz dinámica y precisa, que actúa como un espejo de las calles que atravesamos.
Julian Opie, RETRATO, 2014. Panel acrílico con incrustaciones. 100 x 75 x 3,5 cm. GALERIA MARIO SEQUEIRA. Lisboa. 27.500 €
Destaca. En sus retratos lo hace porque son singulares y característicos, en una simplificación de los rasgos hasta la mínima expresión. Utiliza los resortes de las imágenes del cómic y profundiza en el pop art. Es de agradecer que los creadores incorporen nuevos soportes, investigando sobre los intercambios entre colectividad, creador, tecnología y mercado. Es fama que vende bien en ARCO porque es sugerente su elaboración de lo simbólico en la representación humana.
Candida Höfer, PALAZZO CANOSSA MANTOVA III, 2011. Plexiglás enmarcado en cerezo. 180 X 174,6 cm. 2/6. GALERÍA HELGA DE ALVEAR, Madrid. 52.000 €
Siempre hemos querido una reproducción suya, la de una entre los mejores fotógrafos del momento, célebre y reconocida por sus series sobre bibliotecas, interiores de palacios o de instalaciones industriales, en las que están ausentes las personas. Irreales, magnéticas, inquietantes y definitivas, en una re-creación de las obras de la civilización. Ha supuesto grandes dudas elegir ésta ante MUSEO DI PALAZZO D´ARCO MATOVA III, arcaizante y deslumbradora.
Daniel G. Andujar, EL CAPITAL. LA MERCANCÍA, 2015. Instalación. Impresión digital sobre papel fotográfico. 366 x 450 cm. 1/5. 30.000 €. CASA SIN FIN, Cáceres
De lo más interesante. El autor se sumerge en la deep web, la zona más oscura e inaccesible de la red e investiga en ella sobre los tráficos prohibidos de sustancias estupefacientes, lo hace con los billetes falsos en otro montaje. Descarna la cruda realidad de los dealers en una reflexión sobre el contrasentido de los logotipos en lo anónimo, y de la ocultación. Son quinientas instantáneas capturadas en internet, elaboradas como una muestra documental.
Jason Martin, PRAYER FOR THE TAUNTED, 2015. Técnica mixta sobre aluminio. 42 x 204 x 23 cm. GALERIE FORSBLOM, Helsinki. 120.000 €
Imposible que una fotografía pueda transmitir la fuerza del color, la textura y la materia de algo que participa de la pintura, el modelado y la escultura. Una composición telúrica, magmática más que marina, como corresponde a un artista que se caracteriza por jugar con la abstracción, donde el interrogante se abre sobre el proceso creativo, resultando una zona nueva de armonía. Una galería que nos interesa siempre, abierta a las fluorescencias y el minimalismo.
Nadín Ospina, ATLANTE, 2004. Piedra tallada, 1/5. 100 x 28 x 29 cm. GALERÍA EL MUSEO, Bogotá. 38.000 €
No hemos encontrado cosas demasiado estimulantes en nuestro recorrido por Colombia, el país invitado en ARCO, de donde esperábamos más, pero nos conformamos con esta irónica y divertida investigación sobre la transculturalidad, el choque de las épocas y las civilizaciones, sobre el origen y el presente como lugar común. Siempre se agradece el buen humor y los artistas con ideas en la cabeza, como demuestra Ospina en su último trabajo, donde reflexiona sobre El tiempo de los descubrimientos.
Yeguas del apocalipsis, serie LO QUE EL SIDA SE LLEVÓ, fotografía de Mario Vivado. D 21 PROYECTOS DE ARTE, Santiago de Chile. 2.230 €
Poderosa sorpresa encontrar en ARCO noticias de las performances de Francisco Casas y del recientemente fallecido Pedro Lemebel, uno poeta y el otro escritor. Provocadores, destacadas figuras de la modernidad chilena – injustamente desconocidos en España. Unos efervescentes agitadores de cuyas acciones el galerista ofrece tirajes de calidad en dos formatos. Ésta es muy representativa de los artistas aunque no la elegida, indisponible para publicar.
Cecilia Paredes, DORSAL, 2014. Impresión sobre papel fotográfico y caja de luz. 121 x 121 cm. GALERÍA XAVIER FIOL, Palma de Mallorca. 8.800 €
Elegimos esta caja de luz por su belleza singular y su depurado artificio de luz y composición, en una representación donde se oculta lo evidente, y de la que emana una fuerte influencia oriental. Nos hace pensar en linternas de papel, luciérnagas y mujeres misteriosas del entretenimiento y el escenario. Encubiertas, dispuestas a revelarse desde un mundo de sombras. En una atmósfera de contenida serenidad. Una artista peruana con un catálogo sobresaliente.
Mariana Palma, SIN TÍTULO (fragmento) acrílico y óleo sobre lienzo. 35.000 € GALERÍA CASA TRIÂNGULO, Sao Paulo.
Nos ha parecido curiosa la presencia en bastantes obras, de diferentes procedencias, de una nueva interpretación del abigarramiento barroco, misceláneo, propio de la pintura decorativa del rococó, las grutas seicentescas o los gabinetes de curiosidades plagados de conchas, de corales, de semillas raras. El cuadro representa un fondo marino, o un acuario, donde los colores ácidos crean un mundo inverso y sugestivo. Una de esas ventanas a otra realidad que nos alegran la vida.
Viktoria Binschtok, GUNDAM. Pareja de fotografías. GALERÍA KLEMM´S, Berlin. 8.000 €
Como buenos otakus, en Aladar no nos podemos resistir a un Gundam, aquí encontramos su imagen acompañada de otra, en una dualidad que tiene algo de método paranoico-crítico en la investigación de los procesos asociativos entre entidades diferentes, donde la armonía no se limita al color, el brillo y la textura, sino que se amplía a la reflexión que producen el contraste, y el pensamiento del artista. Un antojo visual de depurado surrealismo e impecable factura. Binschtok es nacida en Moscú y tiene un destacado portafolio.
Julio Le Parc, ONDES PAR DÉPLACEMENT DU SPECTATEUR, 1965-2012. Edición de 12,Ondes par déplacement du spectateur , 1965 – 2012
Plexiglas, Mirrors, Silksreen
50 x 50 x 15,5 cm
Edition of 12 ex
11000€
De vez en cuando seguimos encontrando producciones de arte cinético que están a la altura de las grandes investigaciones del op-art. Nos encantan, porque juegan con la mirada, significan el arduo trabajo sobre la óptica y sus engaños, sobre el movimiento de lo que está quieto, imprescindible en el arte contemporáneo cuando es genuino, como es el caso, y no una displicente impostación. Un artista argentino que es un conveniente vintage.
José Pedro Godoy, PARAISO ENCONTRADO, 2015, óleo sobre tela. 200 x 150 cm. SOLO PROJECTS, Santiago de Chile. 10.600 €
Impactante tapiz de colores, de seres. Representa la variedad infinita de la naturaleza y nos pone en situación tropical. Su autor presenta también otra pintura, titulada Verano, a la que nos ha costado renunciar y que es un revisitado Jardín de las delicias. Aquí encontramos reminiscencias del aduanero Rousseau pero con la naturalidad y la falta de complejos a la que acostumbran los artistas brasileños. Un digno sucesor de los paraísos soñados por Rubens, Brueghel o Wenze.
Rómulo Royo, GODDESSES OF NIBIRU XII, 2014. Tinta, acrílico y óleo sobre tela. 153 x 123 GALERÍA MIGUEL MARCOS, Barcelona. 15.000 €
Son esa “no-mirada” y el fetichismo de su aderezo primitivo los que provocan que encontremos en ésta el espíritu de la Dama de Elche, la Medea de Pasolini, o de Turandot. Ese aire misterioso y exótico nos desvela a un artista destacado, multidisciplinar, creador de mundos hechizantes y hechizados, poblados por heroínas primordiales. De nuevo nos llevamos de la muestra la influencia orientalista y el concepto de la caja de luz, que es dirigida y puntual en este caso.
Antonio Murado, LA BÊTE, 2014. Óleo sobre lienzo, 200 x 270 cm GALERÍA ÁLVARO ALCÁZAR, Madrid. 34.000 €
Tenemos gran afición por los trabajos con manchas cromáticas y texturas, sabemos que es muy difícil conseguir el equilibrio entre una composición armónica, la disposición inédita de los colores, y cierta compensación de las diferentes zonas del cuadro. Aquí se consigue un contraste que atrae por su sencillez y por lo categórico de sus matices, no en vano su autor tiene gran reconocimiento internacional.
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